Durante su presentación en la 70° sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el viernes 25 de setiembre, el Papa Francisco hizo un llamado a los líderes del mundo a atender “la necesidad de buscar una mayor equidad, sobre todo con los países en vías de desarrollo”. 

“Los organismos financieros internacionales han de velar por el desarrollo sostenible de los países y la no sumisión asfixiante de éstos a sistemas crediticios que lejos de promover el progreso someten a las poblaciones a mecanismos de mayor pobreza, exclusión y dependencia. Esto ayudará a limitar todo tipo de abuso o usura, sobre todo con los países en vías de desarrollo”, dijo el Papa Francisco en la ONU.

El Papa Francisco pidió a los países impulsar la educación, principalmente de las niñas, y el desarrollo integral del ser humano para acabar con la pobreza. “Para que estos hombres y mujeres concretos puedan escapar de la pobreza, hay que permitirles a las personas ser dignos actores de su propio destino. Esto supone y exige el derecho a la educación, también para las niñas, excluidas en algunas partes, que se asegura en primer lugar respetando y reforzando el derecho de las familias a educar, y el derecho de las Iglesias y de agrupaciones sociales a sostener y colaborar con las familias en la formación de sus hijas e hijos”.

“El mundo reclama de todos los gobernantes una voluntad efectiva, práctica, constante, de pasos concretos y medidas inmediatas, para preservar y mejorar el ambiente natural y vencer cuanto antes el fenómeno de la exclusión social y económica, con sus tristes consecuencias contra las niñas y niños. Debemos cuidar que nuestras instituciones sean realmente efectivas en la lucha contra los flagelos que sufren las niñas y niños, quienes son los que sufren más con todos estos problemas”, resaltó el Papa Francisco.

El Papa cuestionó duramente la situación de exclusión de las personas que viven en situación de pobreza. “Los pobres son descartados por la sociedad, son obligados a vivir en situación de exclusión y deben injustamente sufrir las consecuencias de los abusos de la sociedad. Las sociedades deben garantizar el acceso efectivo, práctico e inmediato a una vivienda propia, un trabajo digno, una alimentación adecuada, agua potable, libertad religiosa y libertad espiritual y de educación”, manifestó el Papa ante los jefes de Estado y de Gobierno del mundo.

Sobre el tema del cambio climático, el Papa Francisco sostuvo que éste tiene relación con la política del lucro que domina el mercado. “La crisis ecológica, junto con la destrucción de buena parte de la biodiversidad, puede poner en peligro la existencia misma de la especie humana. Las nefastas consecuencias de un irresponsable desgobierno de la economía mundial, guiado solo por la ambición del lucro y el poder, debe ser un llamado a una severa reflexión sobre el hombre".